Una intensa ola polar afecta a gran parte de Sudamérica, con temperaturas extremadamente bajas, nevadas poco frecuentes y alertas por viento en la provincia de Buenos Aires. El frío se mantendrá durante toda la semana.
La presencia de una masa de aire polar ha provocado un marcado descenso térmico en casi todo el territorio nacional. El evento, que se extiende más allá de las fronteras de Argentina, también alcanza a países vecinos como Uruguay, Paraguay, Bolivia y el sur de Brasil. Se trata de una irrupción de aire frío muy extensa e intensa, con registros térmicos que en algunos casos han alcanzado valores mínimos históricos para el mes de junio.
Además del frío extremo, este fenómeno ha dejado postales poco comunes: la nieve se hizo presente en lugares típicos como Sierra de la Ventana, pero también en zonas no habituales como el Gran Buenos Aires. En esta región se reportó la caída de nieve y aguanieve, un hecho inusual pero no imposible en condiciones de aire polar y nubosidad presente en capas bajas.
Más allá del impacto visual de la nieve, el dato más destacado sigue siendo el frío persistente. Aunque el momento más crudo se vivió entre la madrugada y la mañana de hoy, el resto de la semana continuará con temperaturas muy bajas. Incluso con la rotación del viento al norte hacia mediados de semana, las condiciones seguirán siendo propicias para heladas generalizadas en buena parte del país.
¿Cuánto durará el frío?
La ola polar no solo deja una mañana particularmente fría, sino una semana completa con temperaturas por debajo de los promedios normales. Las heladas, de variada intensidad, seguirán ocurriendo en amplias zonas del país. Esto representa un riesgo significativo para sectores productivos, sobre todo en regiones con cultivos sensibles a las bajas temperaturas.